Texas es la entidad de todo los Estados Unidos con más personas detenidas en sus centros de detención de inmigración; de las 33,000 camas que existen para los inmigrantes detenidos en este país, 10,000 camas están ubicadas en el estado de Texas de las cuales 3,086 se localizan en el centro de detención del condado de Willacy, ubicado a una hora al norte de Brownsville, Texas. Por tal motivo es de suma relevancia estar informados de los problemas que dichas instalaciones poseen y como nuestra comunidad se puede proteger.
Uno de los problemas mas comunes y graves dentro de los centros de detención de inmigración son las violaciones a los derechos humanos contra detenidos. Por ejemplo: asaltos sexuales, cuidado médico deficiente, dormitorios por debajo de los estándares humanos y la falta de un proceso legal en base a derecho, por nombrar algunos. Si bien es cierto que el centro de detención ubicado en Hutto, Texas, dio un giro positivo al convertirse en una instalación solamente para mujeres donde ahora se imparten algunos programas educacionales, actividades recreativas diarias y visitas en persona, hay que recalcar que en Mayo del 2010, ICE empezó una investigación sobre un guardia del CCA por estar vinculado con asaltos sexuales a mujeres detenidas en el centro Hutto. Uno de los centros de detención mas problemáticos en Texas es el ubicado en Waco, mejor conocido como Jack Harwell Detention Center en el cual según reportes internos hay un déficit en cuanto a cuidado médico, incluyendo el deficiente cuidado a las mujeres embarazadas, comida por debajo de los estándares humanos dignos y un acceso virtualmente no existente a abogados.
Otro de los problemas mas severos es que la mayoría de centros de detención son manejados por empresas privadas tales como CCA y GEO cuyo propósito es hacer dinero mediante la incursión de mas detenidos en lugar de proporcionar un trato humano y digno a las personas ya detenidas. El presupuesto anual presidencial FY otorgado al Department of Homeland Security en 2012 fue de $2,023,827,000. Si dividimos dicha cantidad entre 365 días que tiene un año, equivaldría a 5.5 millones al día. Si dividimos $5.5 millones al día entre 33,400 detenidos nos da un total de $ 166 al día por inmigrante detenido. En el 2010 CCA y GEO reportaron ganancias anuales de $1.69 y $1.17 billones, respectivamente.
En cuanto a los avances que se han logrado en los centros de detención de inmigración en Texas, hay que mencionar la instalación ubicada en Karnes City, Texas, localizado a 60 millas al suroeste de San Antonio. Dicho centro de detención cuenta con acceso a internet gratuito, llamas al extranjero por 15 centavos el minuto, baños privados, gimnasio, cancha de fútbol y voleibol playero , biblioteca de leyes, lavadoras y secadoras. Aunque éste es un gran avance, aún queda mucho por mejorar para brindarle un trato digno a miles de personas detenidas en Texas.
Me gustaría compartirles las siguiente historia, por mas de un año la Señora Salguero pidió que la sacaran del centro de detención, durante 21 meses a ella no se le permitió ser visitada por sus hijos y no disfrutó de alguna actividad recreativa al aire libre. Como consecuencia la Señora Salguero se hundió en un estado de depresión y ansiedad extrema. Haciendo las matemáticas y con un costo de 166 dólares al día, su detención costó alrededor de 100,000 dólares. Dicha cantidad proviene del pago de los impuesto que los contribuyentes realizan. Además del costo elevado de detener a una persona, éste proceso causa un estrés emocional, mental, y físico a los detenidos y a sus familias. Ambos problemas pueden ser evadidos fácilmente, utilizando métodos alternos de monitoreo.
Por favor les recomiendo que pasen a nuestras oficinas Margaret A. Donnelly, P.C en Ft. Worth y Dallas Texas para que obtengan una carta de protección y reducir el riesgo de ser llevados a un centro de detención. De esta forma, si un oficial de ICE o CBP lo detiene, 99% de las ocasiones al ellos ver que usted tiene una carta de protección, en lugar de mandarlo a un centro de detención, lo dejan que se regrese a su domicilio y le citan una fecha y hora para que se presente ante un juez de inmigración.